
"Harry Potter and the Prisoner of Azkaban" es la entrega más entretenida de las tres primeras. Notamos con el cambio del director Alfonso Cuarón una ganancia en lo que respecta a lo sombría y adulta de la cinta pero vemos puntos negativos en la composición de las escenas que descartan detalles imperdonables. Los efectos especiales son impresionantes logrando una finura que nos encandila. El guión vuelve a ser muy rápido y colisionado sin momentos que nos permitan descansar con grandes sorpresas. La historia cautiva y se redirige a un público no tan infantil con momentos muy buenos e imágenes descollantes.
Los actores principales se mantienen aunque por la muerte de Richard Harris (Dumbledore HP. I y II) la dirección se ve obligada a reemplazarlo con el genial Michael Gambon que recibe un difícil trabajo y gracias a sus grandes dotes actorales lo desempeña a la perfección. Daniel Radcliff (Harry), Rupert Grint (Ron) y Emma Watson (Hermione) tienen momentos buenos y algunos pocos creíbles pero siguen evolucionando lentamente y comienzan a apuntar a nuevos horizontes en especial Emma Watson. David Thewlis (Lupin) y Gary Oldman (Sirius Blake) son dos grandes incorporaciones que tienen una gran importancia en las acciones y nos traen papeles increíblemente logrados.
En conclusión, "Harry Potter and the Prisoner of Azkaban" es un punto y aparte de la historia fantástica orientada al público infantil. La oscuridad va ganando forma y se vuelve cada vez más cortante. La cinta es muy entretenida y tiene buenos efectos especiales, pero es en los detalles donde se nota el punto débil del director. Para los amantes de la saga es un paso más para ir incrementando la afición por ésta mágica historia.
Género: Aventura, Fantasía.
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